Hola a todos,

Después del maratón de recorrer 2.200km en 25 horas seguidas manejando (si contamos las horas adicionales, desde que despertè ese dia y desde que llegamos a Moab hasta que me acostè) en las que estuve unas 39 horas despierto, muy al contrario de lo que suponía me levantè después de dormir apenas 7 horas.

Debia tener todo listo ya que nuestro amigo, Alex Carvallo que vive en el sur de California (a 19h de distancia en carro) venia en camino para acompañarnos en la travesia de diversos tramos del desierto de Moab. Aun debía coordinar y acomodar varias cosas antes de entrar en acción con la Montero. Una de las cosas pendientes por hacer, era acomodar y fijar todo dentro de la camioneta ya que una vez que salgamos a las trillas daremos muchos saltos y movimientos bruscos hacia los lados a tal punto que puedes usar la Montero como licuadora. Desde que la sacamos del contenedor lo que habíamos hecho fue zumbar todo para atrás sin acomodar, sumando el equipaje que trajimos en el vuelo a lo que ya venia en la Montero.

La nevera no enciende, no sé el porqué, pero ahora no tenemos como repararla, nos adaptaremos y tomaremos agua a temperatura normal o caliente. Ricardo, el camarógrafo, no està acostumbrado a estas lides y ya mostró señas de que le va a costar. Cuando salimos de Houston, al ver que era noche cerrada, me pregunta y ahora qué? Nos paramos en un hotel y mañana seguimos? Sin quitar los ojos de la carretera le dije que no, que seguiríamos rodando. Insiste en el tema, y argumenta, ah, entiendo, rodaremos hasta medianoche y allí nos metemos a un hotel, no? No creo, seguramente seguiré corrido, le dije. Como así? Pregunta con tono inquieto. Toda la noche? No paramos a dormir? Entonces como duermo yo? Lo miro rápidamente y agrego, pues puedes dormir sentado como estás. Noooo, vale, como asi? Yo no puedo dormir sentado y tampoco puedo dormir si voy en un carro. Tranquilo que en unas 3 o 4h estarás dormido, sentado y con la camioneta en movimiento, ya verás. Imposible, me dice. Yo así no duermo. A eso de las 2am, ese hombre dormía tan profundo que hasta roncaba. Un par de horas después se despierta, con los ojos muy hinchados, y me pregunta. Y tu de verdad vas a seguir manejando durante toda la noche, no te cansas, no te da sueño? Yo voy aquí despierto acompañándote sin poder dormir. Al escuchar eso lo miro con ganas de decirle que 10 minutos atrás estaba roncando, pero no le digo nada. Cuando amanece (6am) vuelve a preguntar si seguimos o nos paramos. La parte “difícil” es hasta que amanece, ya después es fácil, de aquí solo pararemos en Moab, le dije. Y asi fue.

Sin habérnoslo propuesto habíamos hecho una de las pruebas de campo más exigentes para hombre, maquina y lubricante que se hayan hecho hasta hoy. Hay puntos que debemos tomar en cuenta para evaluar en su justa dimensión, esta prueba de campo para el motor Mitsubishi y el lubricante PDV que lleva en sus entrañas. Uno de ellos, es que la camioneta estuvo inactiva (y el lubricante también, en el carter) durante 3 semanas dentro del contenedor, y apenas se le enciende el motor inicia un recorrido de 2.200km, entre llanuras y por zonas de montañas con muchas subidas largas e inclinadas, donde debimos de forzar el motor por largos ratos, a 5.000rpm debido al peso que llevamos. En una jornada de 25 horas seguidas, todo ello sin que la Temp. del motor se moviera de su punto normal. Una autentica muestra de alta calidad, tanto del motor como del lubricante.

Otra novedad para Ricardo es el tema de acampar. El había escuchado que acamparíamos mucho, pero como que no lo visualizó muy bien. La primera noche de acampada, lo veo muy tranquilo viéndome abrir la carpa de techo, y le digo, que esperas que no abres tu carpa? Que carpa, me pregunta. La tuya. Esta atrás conjuntamente con el saco de dormir y el colchón. Cómo? Y no cabemos los dos en esa? Si cabemos, pero yo duermo aquí y tú duermes en la que vas a armar. Hace un gesto de contrariedad, y me dice, pero que yo nunca he acampado y no sé cómo se arma una carpa. Tranquilo, te enseño, no es difícil.

En la tercera vez que nos mudamos de sitio, al ver que va a anochecer, me pregunta, hoy dormimos……y antes de que terminara la frase…..le digo, dormiremos en carpa. Y pregunta, otra vez hay que armar la carpa, inflar el colchón y sacar todo lo demás? Sip, le contesto. Y si tienes ganas de cocinar, puedes hacer la cena le agrego con tono de sátira. Na`guarà, esto de acampar todo el tiempo es un fastidio. Y lo que te falta de aquí a Panamá, digo yo en voz baja para que no me escuche.

La noche anterior a hoy, acampamos en una floresta cerca de un gran cañón donde hay restos de unas ruinas Anazasi. En esa zona hay animales, venados, pumas, etc. Al llegar al sitio que escoji para armar campamento, iniciamos la tarea diaria de abrir las carpas y colocar las cajas de comida de manera accesible. Para cuando estamos listos para irnos a dormir, Ricardo me dice. Mejor me das la llave de la camioneta porque si escucho algún ruido de animal me voy a asustar tanto que no podré dormir en la carpa y me meto en la Montero. Nada que ver, debes superar ese miedo, si te asustas me pegas un grito. A los 20 minutos, el único ruido que yo escuchaba era su ronquido, que de seguro actuó como repelente sónico para animales.

Alex Carvallo es un venezolano que tiene 13 años viviendo aquí, tiene un taller en el sur de california, especializado en equipar y modificar vehículos 4x4, American Overland Expedition. Detallar su vehiculo es deleitarse viendo lo ultimo en suspensión, equipamiento interno, y cualquier cantidad de “periquitos”, que ès como le llamamos en Venezuela a los accesorios que les ponen a los 4x4.

Organiza travesias en USA y esta coordinando una desde aquí a Ushuaia, al sur de Argentina. Es experto en las rutas del desierto de Moab, al punto que no necesita del GPS para ubicarlas. El fue nuestro punto de apoyo determinante para poder superar los difíciles obstáculos en Moab. Se puede ser buen piloto pero si no conoces bien esta zona, a juro necesitas quien te guiè para afrontar de la mejor manera los obstáculos y evitar asi, dañar tu vehiculo.

Para sorpresa mia, logramos pasar por sitios considerados como de dificultad 5+ (dificultad extrema) solo aptos para vehículos modificados y con cauchos de por lo menos 37” pulgadas de alto (unos 20cm mas altos que los nuestros). Otra carta ganadora con la que no contábamos, fue que su acompañante, también Venezolano, Kevin Barrios es fotógrafo profesional y es el artificie de esas fotos increíbles donde vemos a la Montero haciendo equilibrio en las rocas. A ambos les debo esa inmensa ayuda que nos prestaron, y espero retórnaselas cuando estén de vuelta en nuestro país.

Ha finalizado la etapa de Moab. Este desierto de curiosas formaciones rocosas que se convirtió en icono para la práctica del 4x4 en este país, nos brindó mas adrenalina de la que esperábamos y aun así nos dejo con sed de mas, pero hay un cronograma de expedición que debemos cumplir, y en el cual, aun llevamos algo de retraso que pretendemos recuperar antes de entrar a Centroamérica para poder cumplir con los compromisos ya establecidos.

Estamos escribiendo esto en Salt Lake City. Ahora avanzaremos un poco mas al norte para iniciar el cruce de este inmenso salar que lleva por nombre Bonneville Salt Flats es el mas grande de este lado del hemisferio norte, pero mucho más pequeño que el Desierto de Sal de Uyuni que tiene una superficie 25 veces mas grande. Hoy nos toca acampar en medio del salar, con una temperatura promedio de 5grds. Despues de cruzar el salar, tomamos rumbo al Death Valley.

Espero que les gusten las fotos. De ser así, déjenos sus comentarios en un mensaje que nos llegarà directamente.

Abrazoss
Rui Mendes
Camarografo: Ricardo Perez

La Expedición Mesoamérica 2010 es posible gracias al apoyo de sus patrocinantes: 

PDV, Lenovo, Mitsubishi Motors, TuCarro.com, Oil America, Goodyear, Maxlight, Instituto Nacional de Deportes, Ministerio del Poder Popular para el Deporte, Expo Aventura en Caracas, delvolante.com, Carpas Anaconda, Eicom Comunicación Creativa, David & Joseph y Camaras JVC HD, Spot Emisor de Señal Satelital, Salas Agentes Aduaneros, Alfer en Caracas, Dicainca, Automar Valencia y el Automovil Touring Club de Venezuela.